La actividad denominada como "Celebrando el regreso del Tinglar" fue todo un éxito de acuerdo a los colaboradores de la actividad. Mientras nos preparábamos para dar comienzo a la actividad, patrullamos la Playa Grande de Islote, Arecibo y dimos con un Tinglar desovando.
Fue una gran oportunidad para educarnos sobre como se llevan a cabo las tareas de monitoreo las cuales conllevan: el documentar el nido, las dimensiones de la tortuga (midiendo el ancho del rastro) y luego borrar los rastros de la tortuga en la arena. De esta manera se evita que se roben los huevos del tinglar y se protege de posibles cazadores que quieran consumir su carne, lo cual es ilegal en Puerto Rico.
Muchas gracias al Grupo de Trabajo Comunitario de Arecibo por este artículo y que bueno saber en Arecibo nos ocupamos por conservar nuestra flora y fauna.
ResponderEliminarFernan